Desde nuestro periodo escolar somos bombardeados por infinidad de datos que aceptamos sin rechistar. Por ejemplo, siempre nos han contado que el Guernica, obra magna del cubismo, ilustra el horror que se vivió durante el bombardeo de la villa vasca homónima del 26 de abril de 1937 en el contexto de la Guerra Civil Española. La mayoría de expertos afirma que es una obra antibelicista, pero unos pocos reniegan de esta interpretación.
Es el caso del catedrático de Geografía e Historia José María Juarranz, quien en un estudio que le ha llevado 14 años ha concluido que la obra de Pablo Picasso se trata de un autorretrato familiar (algo que, curiosamente, ya manifestaba Daniel-Henry Kanhweiler, marchante y biógrafo del artista malagueño) en el que todas las figuras representarían alegóricamente a personas cercanas al artista. Según Juarranz, la guerra le era indiferente al padre del cubismo y simplemente relacionó su obra con el bombardeo por mero oportunismo. Durante una reunión en su estudio de París con varios amigos, donde vivía en 1937, uno de ellos clamó “¡Guernica!” al ver el lienzo, y de ahí le habría venido la idea… Incluso, según comenta Juarranz, Picasso comenzó el planteamiento de la obra antes de aquel nefasto acontecimiento. “Yo pinto del mismo modo que otros escriben su autobiografía”, aseguraba el artista…
